Perspectivas para las economías emergentes

Enrique Manzur

De acuerdo a las estimaciones de los principales bancos de inversión, los mercados emergentes continuarán tirando el carro de la expansión económica mundial durante el próximo año. De hecho, se espera que el aporte de los emergentes al crecimiento del Producto Interno Bruto global supere el 66%.



Como parte de ese escenario, se anticipa que Chile, Perú y Brasil seguirán mostrándose como las economías más dinámicas de Latinoamérica, región que exhibiría un crecimiento del PIB de 4% a 4,7%, de acuerdo a las estimaciones de las entidades privadas.

Y es que las pesadas mochilas que cargan Estados Unidos -con su alto desempleo- y Europa -adicionalmente con sus problemas fiscales- constituyen una oportunidad sin igual que los mercados emergentes no deberían desperdiciar. En el caso de Brasil, las declaraciones del ministro de Hacienda del gobierno electo de Dilma Rousseff ya han reafirmado que 2011 será un año de ajuste para la economía del país, pero con un crecimiento fuerte. Los cálculos de las nuevas autoridades apuntan a que el nuevo año cerrará con una expansión del PIB de 5%, lo que -sin embargo- está distante de las proyecciones de 8% con que se espera cierre 2010.

Para Perú las estimaciones son más auspiciosas y se empinan hasta casi 6% para 2011, de acuerdo al Fondo Monetario Internacional (FMI). Durante los últimos años, este país ha exbibido una decidida apertura hacia los capitales extranjeros, lo que ha continuado durante el actual gobierno de Alan García, decisión que ha ayudado a sostener su destacado dinamismo económico.

Las proyecciones del Banco Central para el caso chileno hablan de un crecimiento en un rango de entre 5,5% y 6,5% para 2011, teniendo como motor el desempeño de la demanda interna, donde el consumo y la inversión tendrían una evolución dinámica, pese a que no mostrarán los niveles del año que está por terminar.

Para que este positivo panorama persista y se potencie es importante que se mantenga la contribución que han realizado los inversionistas extranjeros provenientes de fuera y de dentro de la región a lo largo de los años. No obstante, dado que se trata de tres economías altamente expuestas a los precios de las materias primas, una parte importante de su comportamiento económico seguirá atado al desempeño de China, el principal demandante de commodities, que vive su propio problema inflacionario por estos días y cuyas medidas monetarias remecieron ayer a las bolsas, en particular a las europeas y en menor grado a algunas latinoamericanas.